ASCENSIÓN A DOS HERMANAS_PEÑALARA

El domingo 2 de febrero decidimos acercarnos a Peñalara con intención de hacer travesía unos y split otros, por ese precioso lugar. Así que tras madrugón de por medio para conseguir una preciada plaza de aparcamiento, nos presentamos en la zona a eso de las 7:15 AM de la mañana; La noche aún presente junto con unos -7º C y algo de niebla, hacían el paisaje totalmente invernal. 

Tras prepararnos, tuvimos una experiencia muy positiva con unos compañeros montañeros (se encontraron nuestro movil a los pies de su coche), salimos dirección a la pista que asciende hasta la Loma de dos hermanas. Con esas ganas locas de experimentar la ascensión con nuestras nuevas y flamantes linternas frontales, una Petzl MYO RXP y otra Led Lenser H7. Como dije la primera vez que las sacamos de la caja, "SE HIZO LA LUZ", qué pasada. Algún día intentaremos hacer una comparativa entre estos dos modelos y por supuesto de forma imparcial.

Pues bien, ascendimos hasta la pista por el bosque de pinos y tras unos minutos llegamos al refugio del aljibe de agua.

Tras un pequeño despiste mi compañero tiene que bajar al coche de nuevo, así que yo sigo ascendiendo sin abandonar la pista, con la seguridad de que el máquina este, seguro que me pilla. A partir de la bifurcación que nos indica el camino a la Zona de Zabala, yo sigo de frente dirección Peñalara, la situación climatológica empeora pues esta zona está mas desprotegida y el viento acecha, la temperatura está en torno a los -6ºC y la sensación térmica será  entre -12 ºC pues el viento hace de las suyas. 

Mi ascensión es acompañada de varios grupos de gente que en algunos casos se van dirección a Laguna del Peñalara, por los atuendos irían a hacer algún tubo, otros son traveseros. En un momento determinado de muy poca visibilidad, me doy cuenta de que tanto unos como otros no tienen muy claro la dirección a seguir, ese es el momento en el que me doy cuenta de que somos unos !calamidades¡ como dicen por mi casa. Lo pistonudo del tema es que tenemos 2 gps y los dos se han quedado calentitos en sus respectivos cajones, ahhhh!. Tras unos segundos viendo las decisiones que toman el resto de grupos, yo decido quedarme a esperar a mi compañero y tomar una decisión consensuada. Este fue uno de esos momentos odiosos y a la vez fantásticos que tienes en montaña, te quedas sólo, únicamente oyes el viento soplar y el deslizar de las pieles de focas de otros que vienen hacia ti pero que no ves y que te hacen volar la imaginación. 

Pasados unos diez minutos de espera y haber preguntado por mi compañero a los que me sobrepasaban finalmente consigo distinguirle !además de haberle dado un par de voces¡ entre la ventisca. Dios, !què, frío¡. 

Decidimos proseguir con la ascensión viendo que además del tiempo las condiciones de la nieve son muy cambiantes, tan pronto tienes polvo, como que hay unas placas dignas de unos buenos crampones. Intentando seguir la huella de los que van delante llegamos a la Loma de dos hermanas, aquí es cuando ya empezamos a valorar el darnos la vuelta, vemos que incluso los que van delante ya se han decidido al descenso, a nosotros se nos une gente que piensan que estamos bien orientados y que sabemos donde vamos, comprobando con el movil y el gps del mismo estamos sobre la misma cuerda que hay que seguir dirección del Peñalara, lo que nos indica y nos da ánimos a que estamos bien orientados, pero nuestra preocupación no es el ascenso, amén del tiempo, lo que realmente nos preocupa es el descenso puesto que la visibilidad es de 20 m y las condiciones nivológicas son sumamente cambiantes, ahora polvo, ahora placa, ahora nieve venteada sumamente dura, vamos un desastre. Así que decidimos dar media vuelta y volvernos al parking, los que nos acompañan arriba deciden bajarse también.

Tras una bajada sorteando piedras, árboles y "nazarenos" que siguen hacia arriba, en cuestión de 10 minutos ya estábamos en la otra guerra "la de los trineos". Comprobando la temperatura aquí abajo estamos a 0º C. Volviendo la mirada al cielo vemos que el día empieza a abrir así que de nuevo a poner pieles y para arriba. 

Como cambia la cosa, el cielo se vuelve azul intenso, la nieve nos deslumbra pero el frío no cesa y el viento menos.

En cuestión de 40 minutos nos vemos otra vez arriba.

!Qué vistas¡ , nos volvemos a encontrar a compañeros que también habían decidido bajar. 

Seguimos la cuerda hasta la Hermana Mayor y vemos y sentimos que el viento no cesa y que la nieve sigue en las mismas condiciones, sabiendo que no es un día ideal, hablando con otros montañeros y valorando las posibles opciones de descenso, finalmente decidimos lanzarnos por la cara S-E de La Hermana menor hacia el Refugio de Zabala y así olvidarnos de los tubos. No sin algún que otro traspiés llegamos al llano y de ahí a la pista que desciende al parking. 

Como anécdota de la imprudencia personalizada, vimos a cierta distancia a un trío que ascendía dirección al Peñalara en vaqueros botas sport y jersey, creo que la ignorancia realmente no les hace valorar lo que se juegan puesto que la ascensión al Peñalara este día estaba totalmente para crampones, raquetas y ropa adecuada.

Finalmente llegados al coche sufrimos las aglomeraciones del parking, pero esta es otra historia.

En fin esta ha sido nuestra incursión en la sierra vecina y con ganas de volver.

Un saludo y hasta la próxima.