03_ ASCENSIÓN ALMANZOR - CINCO LAGUNAS (GREDOS)

Hola a tod@s, ya está aquí el resumen de la ruta anunciada durante estos días en las redes sociales a nuestros seguidores.

Durante un tiempo hemos estado planeando una salida que tuviese un poco de mayor envergadura a las típicas salidas de un día y como mi gran amigo Sergio, necesitaba desfogarse ante los acontecimientos que se le venían encima, pues planteamos este pedazo de rutón que nos adentra en una de las zonas más bonitas de nuestra sierra, que son Cinco Lagunas y además ascender al pico Almanzor cota más alta del Sistema Central.

Datos de la ruta:

• Distancia recorrida: +- 27 kilómetros 
• Altitud min:  metros, max: 2.592. metros 1.222. metros
• Desnivel acum. subiendo: 1.275 metros, bajando: 1.865 metros
• Grado de dificultad:   moderado a dificil
• Tiempo:   12 horas (Hasta Cinco Lagunas, haciendo paradas), desde aquí hasta Navalperal 6 horas debido al percance, 

aunque se puede tardar en condiciones normales unas 3h

• Fecha:  agosto 14-15, 2012
• Finaliza en el punto de partida (circular):   No

Puntos de Interés:

• Mirador de la Peña del Rayo (camino de la Laguna)
• Laguna Grande de Gredos.
• Almanzor
• Cuchillar de Ballesteros
• Venteadero
• Laguna del Gutre
• Cinco Lagunas
• Laguna de Majalaescoba.

Tras preparar mochilas, material, comida y demás, salimos rumbo a Gredos a eso de las 4:30 AM, con destino la plataforma llegando allí una hora más tarde y comenzando el paseo a eso de las 6:00 AM, como es de prever las "escareruelas" son matadoras a cualquier hora y sobre todo cargados como íbamos.

Pero la verdad es que tras unos minutos y con un paso más bien lento par irnos acomodando a nuestras mochilas, llegamos sin más al puente de cemento que hay sobre el río Pozas, donde ya empezaban a despuntar  las primeras luces del alba, es en este punto donde nos quitamos algo de ropa, pues ya hemos entrado en calor.

Encaramos la ascensión hasta la Laguna grande por su camino, perfectamente señalado y pasando casi sin detenernos en la fuente de "Los Cavadores". Comenzamos el descenso a la Laguna, presentándonos en la misma en tan sólo 2 h, algo que me sorprende gratamente debido sobre todo al peso que arrastramos. Una vez allí y sin dar tregua a mi compañero subimos por la senda hacia la Hoya Antón, donde aquí si, paramos por un buen rato a tomarnos un "refrigerio" y a cambiarnos de ropa pues hemos ido con pantalones largos y aquí "Lorenzo" ya ha echo acto de presencia.

Es desde este punto, donde se ve perfectamente la canal que nos queda por delante y en la que sabemos que vamos a sufrir un poco, la canal es la Bermeja que dá acceso a la portilla de su mismo nombre y que a media altura se bifurcará en dos; Cogiendo la bifurcación a la derecha estaremos adentrándonos en el acceso natural a Almanzor, a esta canal se la denomina del Crampón y que como su nombre indica en invierno es obligatorio su uso para poder subirla.

Inicio de la Bermeja

Subiendo por el Crampón

Desde la Hoya A. hasta arriba del todo, será un completo caos de bloques graníticos, que nos hará esforzarnos en seguir unas líneas de ascensión más llevaderas que las de la línea de pendiente máxima. Parándonos por encima de la bifurcación, ya en la del Crampón, observamos grupos de gente que comienzan su progresión hacia la cima, hay momentos que realmente parece una "procesión", hasta este punto sólo nos habíamos encontrados con dos personas desde que salimos del coche a eso de las 6 de la mañana.
Otra vez metidos en faena y tras unas barritas energéticas retomamos la subida y ya se le va viendo en el rostro la cara de preocupación a mi compañero, pues es la primera vez que se va a subir tan alto y cada vez lo está viendo más cerca.

Tras subir, las cada vez, más acentuadas chorreras de la portilla en su parte superior, ya se vislumbra la cima y es aquí donde las condiciones climatológicas obligan a cambiarnos de nuevo y colocarnos las chaquetas, pues "Eolo" se hace notar de lo lindo.

Acceso a la cumbre del Almanzor 2.592m

Es en este punto, dónde tras descansar un momento empiezan a llegar pequeños grupos hasta donde estamos nosotros. Conocedores de lo que tanta gente puede acarrear en un sitio tan angosto y con algún paso de dificultad, decidimos dejarles pasar e ir preparando el material para nuestra ascensión.
Debido al "supuesto miedo a las alturas" de mi compañero, nos hemos pertrechado de arneses y cuerda, además de alguna cinta y cordino, para hacerle la ascensión más segura.
Cuando todo el personal que nos precedía estaba ya arriba, comenzamos nuestra ascensión. Una vez arriba y tras dejar bajar a algunos que se quedaban algo sorprendidos por nuestra equipación, fue nuestro turno, rápidamente y con Sergio con actitud decisiva subimos por los últimos bloques hasta la última lancha que da acceso al vértice geodésico que corona la cima.

!Lo hemos conseguido¡ !Otra cima compañero¡.

Tras un par de minutos observando el paisaje y las fotos de rigor nos apresuramos a bajar para dejar  pasar a la cola incesante de personal que allí arriba nos damos cita.
La bajada, como siempre decimos, es peor que la subida y es donde normalmente vienen los sustos, tras dejar de nuevo bajar a gente que tenía prisa aunque venía detrás nuestro, la íbamos a hacer haciendo rápel pero como la cantidad de gente que hay tanto subiendo como otros bajando la vemos demasiado nerviosa decidimos destrepar, así que haciéndolo yo primero e indicándole a Sergio donde colocar pies y manos pasamos los tres cuatro pasos más delicados y proseguimos nuestro descenso hasta las mochilas. Y es aquí donde volvemos a ver imprudencias de ciertos individuos tanto subiendo como bajando, la más general bajar de cara al precipicio por zonas muy verticales, en las que un desequilibrio o un tropezón te manda al vacío seguro.

Tras salir de allí con cierto apremio, nos dirigimos por la espalda del Almanzor al cuchillar de Ballesteros, lugar donde se observan una de las vistas más bonitas del circo y de las gargantas de la zona  sur de Gredos.

Impresionante vista del Circo de Gredos desde Ballesteros 

Cuchillar de Ballesteros y al fondo el Gutre y la Galana

En nuestro descenso del Almanzor decidimos no quitarnos los arneses por si en algún momento del cresteo precisamos encordarnos, tengo que decir que en el descenso hay un par de sitios que dan algo de respeto pero que en buenas condiciones no presentan ningún problema.
Toda la ruta desde el Cuchillar de Ballesteros hasta el Venteadero está jalonada de hitos bien visibles, aunque en ocasiones y para mi gusto te hacen perder demasiada altura. Esto es debido a que comparten ruta con la ascensión al Almanzor cuando se sube por la Canal de los Geógrafos.

Tras un constante sube y baja a media ladera llegamos al extremo más oriental del cuchillar y es aquí donde nos adentramos en el paraje del Venteadero, que como su nombre indica, el aire es una constante, haciéndonos buscar refugio en los vivacs que hay por la zona y es dónde decidiremos parare a comer pues la hora a la que hemos llegado 14:00 y el transcurso del día, ya lo merece. Hay que decir como curiosidad y por si alguien lo precisa, que en este punto entra algo de cobertura para Orange  y Yoigo, pero que debido a la lejanía de las antenas, esta ,es muy pobre y lo mejor en estos casos es utilizar la red de datos.

En el Venteadero, al fondo el Gutre y la Galana con su cuchillar.
¡Esta cámara necesita cambio!

Tras comer y hacer unas fotos de rigor nos ponemos en marcha dirección a  La Galana, segunda cima del macizo, que en esta ocasión no haremos cumbre dejándola a nuestra derecha y metiéndonos dirección a Cinco Lagunas por al cuchillar de Gutre y su portilla. Hay que decir que esta es una de las zonas más alejadas y menos visitadas del Circo, lo que la hace mucho más atractiva además de peligrosa sino se conoce o se tienen unos conocimientos mínimos.

Laguna del Gutre y la Cimera de Cinco Lagunas.

La portilla del Gutre se presenta muy empinada y totalmente disgregada, la parte superior es una mezcla resbaladiza de  piedras en descomposición y tierra, además de que las paredes laterales de la canal están totalmente descompuestos y no ofrecen ninguna resistencia. Este tramo realmente es un calvario para bajarlo y sobre todo con peso, pero la continua vista de la laguna del Gutre y más abajo La Cimera de Cinco Lagunas, nos estimula para terminarla.

Lo más parecido a esquiar en seco¡¡¡¡

A la parte inferior de la hoya también se la denomina el Canchal de la Galana y por suspuesto que no es ningún camino de rosas, es para que os hagáis una idea como el triple de longitud que la portilla Bermeja y las piedras que lo conforman tiene una disposición y tamaño totalmente caótico, lo que nos hace ir buscando continuamente el mejor camino, aquí los hitos brillan por su ausencia y los que hay en muchas ocasiones ni se ven o están muy deteriorados. Es fácilmente frecuente encontrarte con machos y cabras, los primeros muy huidizos que te siguen tus torpes movimientos desde la distancia.

Impresionante

Tras algo mas de un par de horas desde que salimos del Venteadero por fin llegamos a la laguna del Gutre. Esta laguna está conformada por una hoya rodeada de enormes bloques graníticos, con un agua espectacularmente clara que recuerda al Charco de la Esmeralda (Charco situad por encima de la Laguna Grande),  al llegar a ella observamos que hay un par de vivacs donde pasar la noche. Es en este punto dónde tras meter nuestro doloridos pies en el agua tomamos una de las decisiones más importantes de nuestra aventura, bajar a dormir a Cinco Lagunas, esta decisión la tomamos por que allá por la portilla de Cinco Lagunas, no parábamos de ver entrar gran cantidad de nubes y a buen ritmo, había aire, aunque nosotros no lo notásemos pues en esta zona estamos muy bien resguardados.

Laguna del Gutre, al fondo el Belesar

Tras unos minutos de descanso y de hacer unas fotos a unas cabras, nos pusimos en marcha hacia nuestro nuevo objetivo, bajar a Cinco Lagunas. El camino desde aquí, la Lag. del Gutre,  hasta abajo es un constante ir y venir de lanchas de granito y taludes de hierba de unos 50-60º de inclinación, muchas de estas lanchas, como os podéis imaginar terminan en otras o en cortados de más o menos altura. La senda, estrecha en muchas ocasiones, está guiada por hitos en ocasiones están al límite del equilibrio y otras veces simplemente se han caído. En cuestión de poco más de 1h 45´nos vimos abajo buscando un lugar donde pasar la noche.

Por la senda a Cinco Lagunas, abajo la Laguna Galana y al fondo la Hoya de las Berzas

Escogimos un lugar bajo una lancha de piedra con paredes formadas por numerosas piedras para instalarnos y pasamos el resto de la tarde hasta las 20:00 h para instalar nuestra tienda haciendo visitas a las Lagunas Cimera y Galana, además de sacar el plano, orientarlo y buscar los riscos que nos rodeaban.
Durante unos instantes tuvimos la sensación de ejercer de ganaderos y es que en pocos instantes se nos acumularon frente a la tienda cerca de 20 cabras. Ojo¡¡¡ A los que os sintáis tentados de darlas algo de comer, porque si lo hacéis olvidaos de quitarolas de encima.

Nuestro Rebaño

Nos acomodamos y disfrutamos de nuestra cena, a partir de aquí nuestra placentera aventura casi se torna en odisea, al darse la circunstancia que nunca se debe de dar y que cada vez es más habitual, tener que ayudar a unos inconscientes que no saben donde se meten. Os dejo el enlace para que lo leáis por si es de vuestro interés.

Así es como amanecimos a la 6:30AM

Cuando hace un momento os decía que tomamos una de las decisiones más importantes es por lo siguiente, si hubiésemos dormido en la Lag.del Gutre, bajar al día siguiente por esas lanchas con tanto peso hubiese sido un autentico riesgo aún contando con material de escalada y lo mejor hubiese sido subir a la Portilla del Rey y bajarnos por La Trocha Real a la plataforma o deshacer el camino por la Portilla del Gutre y bajarnos por el Venteadero y canal de los Geógrafos a la Laguna.

Para dar por concluida esta excursión deciros que la bajada desde Cinco Lagunas a Navalperal de Tormes, no tiene ninguna complicación técnica en condiciones normales, pero cuando las condiciones cambian puede suponer mucho riesgo a cualquier persona que no tenga la práctica y la destreza de andar por el monte, pues está repleta de lanchales lisos como espejos. El descenso está totalmente marcado por hitos y únicamente hay que seguirlos, desde la Lag. de Majalaescoba hata el parking es una senda bien marcada y con un desnivel suave pero constante. Fijaos bien en las fotos, como en menos de 12 h puede cambiar un placentero día de montaña.

Esperamos que os haya gustado el relato y que decidáis realizar la ruta, la zona y su ecosistema es una pasada.

Aquí os dejamos el Trak, decir que desde Cinco Lagunas hasta el Chozo de la Barranca está encajada evitando el máximo posible los lanchales pero cuando son inevitables su descenso se hace por las grietas  que en ellos mismos existen.

Hasta la próxima.